En esta ocasión hablamos del sellado de juntas para construcción industrializada, una de las formas de impermeabilización más eficiente de la industria.

Se trata de uno de los procesos más importantes en la construcción, puesto que alarga la vida útil de las juntas y garantiza la durabilidad y resistencia de las mismas.

A través de nuestro contenido conocerás los tipos de juntas que se manejan en la construcción industrializada y detallamos las alternativas ecológicas que ofrece el mercado en la actualidad.

Consiste en un proceso, de hecho, uno de los más importantes dentro de la industria de la construcción. El sellado de juntas se realiza para alargar la vida útil de las juntas y facilitar su función.

Si no se sellan las juntas lo más probable es que diferentes agentes externos sólidos y líquidos se alojen entre las aberturas, dañando el mecanismo, afectando el movimiento y el poder para manejar cargas.

Se sellan las juntas en puentes, edificaciones y vías, el proceso se realiza usando materiales de calidad que se adapten al tipo de junta y a las condiciones del ambiente.

El sellado de juntas tiene beneficios sobre la construcción, entre ellos estos:

Ejecutar este proceso es importante porque evita que el agua y otros elementos se cuelen a través de las fisuras, logrando afectar al material y disminuyendo la vida útil de la estructura.

De hecho, una de las principales tareas a ejecutar en construcciones de hormigón y de otros materiales es el sellado de juntas. Especialmente, si estas estructuras o superficies estarán expuestas a las condiciones climatológicas y soporten movimiento continuo, por ejemplo, es indispensable el sellado de juntas en las carreteras.

Las aberturas que se hacen en las estructuras para facilitar la movilidad y mayor flexibilidad, son las juntas. Se disponen en el concreto como una compensación de la expansión y contracción del material que se genera por las condiciones climáticas.

Al diseñar las estructuras se debe predecir dónde posiblemente se producirán grietas en el material y cómo se expandirá, para evitar las grietas. Posterior a esa evaluación, se colocan las juntas en las ubicaciones necesarias.

En esta parte de nuestro contenido te presentamos los diferentes tipos de juntas que se usan para potenciar el desempeño de la superficie de concreto.

Cuando el concreto se endurece tienen menos volumen que cuando está fresco. En superficies expuestas la contracción por fraguado se produce más rápido lo que ocasiona un alabeo que puede terminar en agrietamientos del material.

La retracción lineal de elementos de este material es mayor en la medida que su volumen sea menor y su área superficial. Entonces, las juntas de contracción tienen el propósito de determinar, de forma anticipada, la apreciación de las grietas.

Este tipo de juntas tienen fines estéticos, pero también garantizan el funcionamiento adecuado de la estructura.

Las juntas de dilatación son imprescindibles, y es que, todos los materiales de construcción poseen un coeficiente de dilatación. Dicho coeficiente va en función de la variación de la temperatura, lo que significa que en temperaturas altas el material se dilata y cuando baja la temperatura se contrae.

Entonces se debe prever áreas donde estas tensiones pueden absorberse en las juntas de dilatación. Estas se ejecutan en cada elemento de construcción de un edificio, es decir, suelos, paredes, estructuras, fachadas, techos y cubiertas.

La finalidad de las juntas de dilatación es prevenir fisuras, que la estructura se desprenda o aparezcan grietas.

En particular este tipo de juntas se colocan en las losas de hormigón, con la finalidad de definir las extensiones de cada ubicación individual, en diferentes momentos de la colocación del concreto.

Una característica de las juntas de construcción es que mantiene en su lugar al concreto nuevo. Este tipo de juntas se diseñan para permitir que ambos lados de las losas se desplacen, pero también deben ser capaces de transferir los esfuerzos de flexión provocados en las losas por las cargas externas.

También se diseñan para permitir el desplazamiento horizontal en ángulo recto de la junta con la superficie, esto generalmente se produce por el movimiento de contracción y térmico. Además, las juntas de construcción no deben permitir el desplazamiento en rotación o en vertical.

Las juntas de aislamiento se utilizan para separar cada losa de otras partes de la construcción, por ejemplo, paredes, columnas u otros lugares de restricción.

Las losas de concreto se expanden o contraen y es cuando entran en acción las juntas de aislamiento asegurando que la losa no sufra daños, las más frecuentes, grietas que pueden causar a su vez problemas en las tuberías, paredes, pilares o columnas cercanas a la losa.

Tomando en cuenta que las juntas admiten el movimiento, de forma vertical y horizontal, entre las partes cercanas a la estructura y permiten reducir daños por grietas cuando los movimientos se restringen.  

Las juntas de aislamiento se emplean para minimizar las tensiones de compresión que se generan en las intersecciones en T, las asimétricas, puentes, rampas, entradas de drenaje, cimientos de edificios.

También en otros lugares donde se produzcan movimientos diferenciales entre una estructura y una superficie, por ejemplo, el pavimento.

En cuanto a las juntas de expansión, se usan para consentir la expansión y contracción del concreto en la etapa de curado y servicio. Este tipo de juntas permiten modificaciones dimensionales en materiales como el hormigón por la carga.

Se trata de una unión que separa zonas que podrían afectarse por las modificaciones dimensionales.

La masilla de poliuretano es un material plástico que se utiliza en la construcción, pero, además de otras formas lo que lo hace un material bastante versátil.

Químicamente es un polímero, es decir está formado por pequeñas moléculas conectadas entre sí, una unión nada convencional, puesto que es bastante fuerte que le confiere una estabilidad única al material, cada vez más usado.

Como se trata de un material adaptable es capaz de quedar rígido o flexible. La versatilidad del poliuretano permite que sus aplicaciones sean amplias, las cuales pueden ser:

Entre las características del poliuretano podemos destacar que se trata de un material liviano y termo endurecedor, funciona como un perfecto aislante térmico, además otorga estabilidad dimensional inalterable.

Pero, no debemos confundir el poliuretano con el poliestireno, entre ellos hay marcadas diferencias.  Aunque ambos se clasifican como polímeros, el poliestireno tiene un coeficiente de aislamiento más bajo que el poliuretano, además el primero ofrece mayor resistencia a los niveles de corrosión. 

Este en particular es un sellador de juntas a base de poliuretano. Se trata de un producto de altas prestaciones para pavimentos y demás aplicaciones de la ingeniería civil.

El sellador tiene características únicas, es resistente, elástico y coloreado. Funciona para sellar distintas configuraciones de juntas en pavimentos y estructuras.

Con este producto el sellado es impermeable, con excelentes propiedades mecánicas. Es capaz de resistir la aplicación de productos químicos y diferentes temperaturas.

Otro producto a base de poliuretano, resistente a la abrasión a los hidrocarburos y a los elementos atmosféricos. Es un sellador de juntas con suficiente elasticidad para absorber movimientos continuos de una estructura que por lo general se provocan por variaciones en la temperatura.

Se aplica para el sellado de juntas horizontales limpias, sin polvo, libre de grasa, para aplicar en terrazas con paso vehicular o peatonal, partes inconsistentes, aeropuertos o pavimentos industriales.

Las opciones para la arquitectura ecológica son cada vez más amplias. En este caso vamos a destacar algunas alternativas de sellado de juntas ecológicas, especialmente para construcción industrializada.

Estos productos tienen enormes ventajas que se deben aprovechar, por ejemplo, no incluyen disolventes entre sus componentes, lo que supone un beneficio para la salud y el medio ambiente.

Este producto es una silicona sostenible. Un claro ejemplo de la creciente oferta de productos sostenibles para la industria de la construcción.

Se consigue en el mercado como Fugabella Eco Sillicone, se trata de un sellante orgánico compatible con la bioconstrucción.

 Este producto tiene propiedades antimoho, además de alta elasticidad. Es un sellador que se puede emplear para sellar juntas de dilatación.

Un sellador ecológico que no afecta el medioambiente, además está formulado con materia prima renovable. Este producto para construcción industrializada cumple con los requerimientos de aplicación establecidos en la norma ISO 11600 F25-LM.

Está clasificado como un sellador de polímeros de silano. Tiene una amplia gama de aplicaciones y su procesamiento es fácil.

Las cualidades de este producto recaen en la combinación de propiedades de sellado, estas son poliuretano y silicona.

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